Fruto
de las casualidades, fue el segundo día de mi reciente visita a
Badalona y en el corazón de la ciudad cuando te conocí, gracias a
esa personalidad que es Enrique Campos. Parafraseando a Santi
Escribano, lo primero que vi al darnos la mano fue esa sonrisa bajo
el bigote, sorprendido por el hecho de que un chaval de Valencia
pudiera haber viajado a Badalona por una de sus mayores pasiones: la
Penya. Rápidamente me contagié de tu personalidad, puro amor,
gracias a que me hiciste sentir como uno más de la familia
verdinegra en ese increíble día que pasamos juntos por el Olímpic,
el Pregó de Laprovittola, Badalona,… En resumen, nunca lo
olvidaré. Y ya me dejo de introducciones para darte paso, al
verdadero protagonista de este entrevista: don Miguel Ángel Forniés,
primer fotógrafo que cruzó el Atlántico para acercar la NBA a
todos los aficionados del baloncesto. Una carrera muy dilatada, con
un fuerte tinte verdinegro: ¿cómo llegaste a formar parte de la
Penya?
Durante
dos años, 93/94 y 94/95, formé parte de una empresa llamada “CDC
promocions i consulting” que se dedicaba a organizar 3x3 en toda
España. En el 95 se organizó un torneo internacional en Estrasburgo
y me contrataron para realizar las fotos, hablando con el Joventut
para que fuera como uno más de su expedición. Hablé con los muchos
medios deportivos como MARCA, GIGANTES, Mundo Deportivo, Agencia EFE,
etc. y, con mi aún máquina de escribir, me encargaba de realizar
crónicas diarias de los partidos. A mi vuelta, la situación era
convulsa en el club de Badalona, después de una fatídica rueda de
prensa donde el presidente se había enfrentado con los medios. En
ese momento me preguntan: “te ves capaz de reconducir esta
situación?”, a lo que respondo: “por supuesto”. Se me solicitó
realizar un informe con todos aquellos aspectos que debían ser
modificados para salvar la situación y poder mejorar la relación
con los medios. Es aquí cuando entra en juego mi íntimo amigo Jordi
Román, con quien había colaborado en Nuevo Basket y otros proyectos
personales, dándome sus consejos desde el punto de vista
periodístico para complementar mis ideas como interlocutor, y así
poder elaborar ese informe. Se presentó al club y, tras una reunión
con el presidente, salí con un contrato de 3 meses bajo el brazo
para empezar el 1 de febrero de 1996 y me quedé 19 temporadas.Haciendo un pequeño flashback en el tiempo con respecto a la primera pregunta, ¿cómo fue eso de ser un pionero en tu profesión?¿cómo afrontaste la aventura americana y qué recuerdos guardas con más cariño de esa época?
En esos momentos yo había estado haciendo de agente de jugadoras americanas, con un abogado neoyorquino, llévandome una pequeña comisión. Al mismo tiempo, yo formaba parte de Nuevo Basket, y le pedí a Franco Pinotti que me acreditara para una serie de partidos: New York, New Jersey, Boston y Philadelphia; a lo que él respondió encantado. Con ese dinero ahorrado pude reservar en un hostal y asistir a los mencionados partidos, empezando por un Dallas campeón la temporada anterior contra Sixers.
Recuerdo emocionado cuando
pasaron por mi lado Julius Erving y Moses Malone, vi debutar a
Charles Barkley con un mate de espaldas como primera canasta, el
debut de Michael Jordan en el Madison Square Garden, etc. Con una
grabadora y, por supuesto, mi cámara, me dediqué a hacer un pequeño
diario de todo aquello que iba presenciando. Dos días más tardes
presencié una brutal pelea entre Julius Erving y Larry Bird en
Boston, me quedé alucinado, yo solo hacía que disparar fotos…
Tras 6-7 partidos en un total de 12-14 días volví y la revista
publicó mis reportajes como “Crónicas de un Viaje Alucinante”.
Continué con entrevistas a los jugadores, que iban apareciendo
semanalmente en la revista, titulando la de MJ como “Oro negro en
la NBA” y haciéndole firmar una dedicatoria para los lectores que
más tarde salió publicada. Los jugadores recibían más tarde un
ejemplar de la revista con su entrevista. Y así fue, un total de
unos 85 partidos NBA conmigo sentado en el suelo tomando
instantáneas.
Como
pude comprobar por mi mismo, atesoras una interminable colección de
recuerdos, datos, anécdotas,… del baloncesto de los últimos 30-40
años. Personalmente siento envidia sana, porque hacer de tu pasión
tu profesión está al alcance de muy pocos. ¿En qué consistía tu
labor en la Penya? ¿Qué papel desempeñabas en el organigrama del
club?
Mis
tres hobbies eran baloncesto, fotografía y viajar, y tuve la suerte
de poder hacer de ellos mi forma de ganarme la vida. Me considero una
persona muy privilegiada, especialmente cuando ves que el club de tu
vida te contrata como jefe de prensa. Cuando al año siguiente de
empezar se gana la Copa en León y vas viendo que llegan jugadores de
la cantera como Rudy, Ricky o Pau Ribas; que fichan a Aíto en 2004,
ganando la Eurocup de la FIBA en Kiev en 2005, etc. Grandes jugadores
y grandes personas que hacen increible a este club, yo tenía una
labor coordinativa, puesto que al venir del mundo periodístico, yo
sabía qué era exactamente lo que todos necesitaban. Nunca negué
ninguna entrevista, tanto a chavales que acababan el instituto como a
gente de universidad; facilité a todos aquellos iniciados en la
fotografía el que participaran durante 3 partidos para ver cómo se
desenvolvían, pidiéndoles más tarde un CD con sus instantáneas.
Estamos hablando del actual fotografo del Barcelona y de David Grau,
fotógrafo principal de la Penya. Intenté siempre contentar a todo
el mundo!
Entraste
a formar parte de la Penya en 1996, durante una época convulsa para
un club que un lustro atrás dominaba allá por donde pasaba,
llegando a apoderarse de la gloria europea en 1994 con esa Euroliga
de Tel Aviv. Fueron años difíciles pero, poco a poco y con una
buena gestión, ya a mediados de la primera década de los 2000, con
esos Ricky, Rudy, Ribas,… se tocó la gloria con un par de torneos
continentales y con esa brillante Copa del Rey de 2008. ¿Cómo
viviste esa “resurrección” cual ave fénix del equipo?
Pues,
el día a día de un equipo que va ganando se traduce en una
acumulación de trabajo: a medida que vas pasando de eliminatorias el
montante aumenta, si llegas a una final se vuelve inacabable y, si la
ganas, ya ni te digo! Es una noche de no dormir, teniendo a todas las
televisiones al día siguiente llamando a tu puerta. Aún recuerdo el
primer entrenamiento de Ricky con la Penya, cuando vino con una
camiseta blanca de Danilovic de la Kinder Bolonia. Ver a Pau Ribas
desde su etapa en Mini, cadete, infantil, etc. ver cómo van
progresando y subiendo, momentos que marcan un hito en la historia
del club. No sólo jugadores, entrenadores como Alfred Julbe, Manel
Comas (DEP), 5 años con Aíto, incluso Pepu y, más tarde con Salva
Maldonado, con quien mejor relación he tenido, hace que uno nunca
escatime en dedicación y esfuerzo. Obviamente, no todo son alegrías:
cuando se pierde, cuando despiden a un entrenador, cuando uno mismo
comete errores,.. Aún recuerdo cuando en la rueda de prensa de DKV
bauticé al director gerente Josep Santacreu como Josep Santandreu,
menuda bronca me cayó! Menos mal que lo pudimos solucionar rápido.
Hay veces que uno se plantea dejarlo todo pero, como decía un buen
amigo: “cuando te cabrees, échalo todo en la mochila, suelta un
par de improperios y vacíala, para empezar de nuevo”.
Y
como si de un círculo se tratara el Joventut volvió a caer, caer en
otra época oscura donde se llegó a pensar en lo peor: la
desaparición del club. Pero de nuevo, con una estoica labor de
alguien como Carles Durán, sabiendo hacer creer a sus jugadores en
el milagro, salvaron la papeleta y lograron mantenerse en la Liga
Endesa. Esta temporada ya es otra historia, las cosas se están
haciendo muy bien y se llegó a unas flamantes semifinales de Copa
del Rey y ahora mismo se está peleando por una plaza en los Playoff
de Liga. Ya lejos del organigrama del club, pero todavía muy ligado
al mismo, ¿cómo ves al club en este nuevo ciclo?
Bueno,
hace un año la situación era muy caótica. Recuerdo una
convocatoria de Juanan Morales donde lo pintaba muy oscuro, yendo
último en la Liga e incluso planteándose la desaparición… Yo ya
nos veía en la LEB pero, por cosas del destino, llega un jugador
como Nicolás Laprovittola, que no había terminado de eclosionar en
los anteriores clubes donde había estado. Lo trajo Ocampo, el cual
fue sustituido por Carles Durán, una persona que conocía la casa a
la perfección, ya que había formado parte de la misma años atrás
traído por Miquel Nolis. Eso es muy importante, ya que conocía a
muchos de los jugadores de haberlos entrenado en el Prat y, si es
posible la contratación de Marko Todorovic, es gracias a él y a la
buena gestión desde los despachos de Jordi Martí. Destacar la
llegada del grupo Grifols, que han posibilitado cosas como buscar
sustitutos par ajugadores lesionados, cosa antes impensable. Quincy
Lewis no llegó a debutar y se trajo a Harangody, el cual ha dado un
rendimiento increíble; se lesiona Birgander y llega Delía; se
lesiona Dawson y llega Bongou Colo, etc. El panorama ha cambiado y
sabiendo como es Juanan, que mira muy bien presupuestos y qué se
gasta, los resultados son visibles en los partidos. Eso sí, si
defendieran un poco mejor tal vez se hubiera podido llegar un poco
más lejos… Eso sí, los PlayOffs y la clasificación para Europa
traerán mejores nombres, gracias al escaparate que proporciona el
jugar en Europa. La clave del éxito pasa por mantener una base de
unos siete jugadores y, a partir de ahí, un par de fichajes que
puedan integrarse fácilmente y hacer mejor al equipo.
Y
ya para ir terminando con esta entrevista, quería darte mi personal
enhorabuena por ese increíble tercer puesto conseguido en el
Campeonato Junior, donde tu sobrino Aleix ha tenido un papel muy
importante: MEJOR PASADOR DEL TORNEO!! y unas estadísticas de
infarto. Solo desear la mejor de las suertes para su futuro, estoy
seguro que tiene talento y actitud, más importante aún, suficientes
para conseguir lo que se proponga. Y la última pregunta: ¿qué
significa el baloncesto para ti en estos momentos? ¿Cómo lo vives
ya desde un punto de vista no profesional?
La
ilusión por el baloncesto no la he perdido nunca y la cámara la
recupero siempre que puedo: vengo del Campeonato Junior de hacer más
de 1200 fotos. Disfruto muchísimo y hay gente que dice “pero si
haces fotos no ves el partido”, a lo que respondo: “si el partido
es bueno, las fotos son buenas”. Tengo ilusión y ganas, sigo
ligado al departamento de comunicación los días de partido. También
voy 2-3 veces por semana a los entrenamientos, me gusta ver cómo
evoluciona el equipo. No me he desligado nunca, para mi el baloncesto
es vida, y como tú bien dices de Aleix, ojalá le salga todo bien.
Ya fue mejor base del Adidas Improvement Tournament del pasado
diciembre en Valencia y ahora sorprendio por sus brillantes
estadísticas personales (12 puntos y 6 asistencias de media por
partido) y por ayudar al equipo para llegar a semis, con un triple in
extremis
desde 10 metros contra Gran Canaria y luego por dar la asistencia a
Zsombor Maronka para que metiera el triple que les daba ese tercer
puesto.
ENTREVISTA COMPLETA (AUDIO):
LAS FOTOS MOSTRADAS FORMAN PARTE DEL ARCHIVO DE M.A. FORNIÉS









